5. Biología Molecular
5. Biología Molecular
El estudio de los cambios genéticos moleculares en el cáncer de pulmón está permitiendo definir patrones de personas con alto riesgo de sufrir esta enfermedad, detecta pacientes con alto riesgo de presentar recidiva tumoral y permite tratar de diseñar terapias específicas basados en los hallazgos encontrados.
El cáncer de pulmón aparece como consecuencia de acumulación secuencial de cambios múltiples en el genotipo y fenotipo de las células expuestas a carcinógenos como el tabaco. De entre los genes activadores (oncogenes), ras es el mas extensamente estudiado. El oncogen K-ras está presente aproximadamente en el 30% de los carcinomas no microcíticos pulmonares, estando relacionada su presencia con un peor pronóstico de la enfermedad. Los oncogenes myc se detectan en el 18-24% de los carcinomas microcíticos. El protooncogen c-erb-B1, codifica el factor de crecimiento epidérmico, siendo un factor de mal pronóstico para el carcinoma epidermoide de pulmón. El protooncogen c-erb-B2/Her-2/neu está relacionado con el adenocarcinoma confiriéndole mayor agresividad.
Lo genes supresores, como Retinoblastoma y P53 bloquean el ciclo cellular impidiendo la progresión tumoral. Su alteración implica pérdida de los mecanismos de control y progresión tumoral. El oncogen p53 se observa hasta en el 77% de los carcinomas no microcíticos de pulmón y en el 49% de los microcíticos, siendo factor de mal pronóstico en los primeros mencionados. Estos tumores también se han relacionado con alteraciones cromosómicas (delección del brazo corto del cromosoma 3) y con el gen del retinoblastoma.
Otras alteraciones genéticas, como la inhibición de la apoptosis, la angiogénesis y la adquisición de la capacidad de invasión y metástasis. La inactivación epigenética via metilación del DNA representan vias de escape a los mecanismos de control celular.
El conocimiento de la expresión génica de los tumores de pulmón, permite establecer no solo el conocimiento de las vías de señalización en este tumor, sino establecer sistemas de definición de pronóstico y de perfil genético, utilizados en detección precoz de este tumor. Además, estos estudios han permitido desarrollar nuevos fármacos que actuan por ejemplo inhibiendo los receptores con actividad tirosín-quinasa.