9. Efectos Directos De Lh-rh En Los Tumores
9. Efectos Directos De Lh-rh En Los Tumores
La evidencia clínica apunta a que la mayoría de los beneficios del tratamiento con análogos de LH-RH se producen por supresión de la secreción de gonadotropinas y/o de hormonas gonadales. El beneficio del tratamiento se centra en pacientes de cáncer de próstata, en los que prácticamente todos son ricos en receptores de andrógenos, y en cáncer de mama, en los que un 50% son ricos en receptores de estrógenos (9,19).
No obstante, existe evidencia de efectos directos de los análogos LH-RH sobre células tumorales en cultivo, en particular aquellas líneas ricas en receptores LH-RH. Tal es el caso de las líneas celulares de cáncer de próstata humano LNCaP y DU 145, así como en tumores del modelo de cáncer de próstata de ratas Dunning.
Más del 80% de los cánceres de próstata humanos contienen receptores de alta afinidad para el análogo [D-Trp6]-LHRH. También se han descrito receptores para LH-RH en líneas celulares humanas de cáncer de mama, y hasta en el 52% de 500 especímenes de cáncer de mama humanos analizados. Asimismo, los receptores de LH-RH están presentes en el 78% de los cánceres de ovario analizados y en el 80% de los cánceres de endometrio.
La presencia de receptores de LH-RH en células tumorales sugiere un papel regulador para LH-RH en el desarrollo del tumor. Pero la LH-RH de origen hipofisario no se encuentra en concentraciones significativas en sangre periférica como poder para contribuir a la estimulación celular, lo que no quiere decir que sus receptores no puedan ser considerados como diana terapéutica.
Recientemente se ha identificado la presencia de células tumorales productoras de LH-RH tanto en tumores prostáticos con mamarios, mediante hibridación in situ de mRNA para LH-RH. Los péptidos producidos localmente, iguales o parecidos a LH-RH, podrían jugar el papel promotor del crecimiento tumoral que justificaría la presencia de los receptores. Esta aparente aberración fisiológica en el fondo es sólo un hallazgo más de la potencialidad de los factores autocrinos y paracrinos en el desarrollo autoestimulado de los cánceres.
En cultivos celulares de varias líneas humanas ricas en receptores de LH-RH se ha podido demostrar que los análogos LH-RH producen inhibición de su proliferación. Eso es cierto también para los antagonistas de LH-RH. Estos hallazgos identifican a esos tumores como dianas potenciales para el tratamiento con análogos o antagonistas de LH-RH, abriendo una nueva avenida de posibilidades terapéuticas basadas en la LH-RH (9,19).