3.2 Daño del ADN
3.2 Daño del ADN
La mayoría de los estudios realizados no demuestran una correlación entre la frecuencia de micronúcleos inducidos en linfocitos “in vitro” y la toxicidad del tejido sano (Rached et al., 1998; Slonina et al., 2000). Sin embargo, un estudio realizado en 55 pacientes con cáncer de cérvix avanzado, mostró una correlación significativa entre la frecuencia de micronúcleos a los 4 Gy y la gravedad de las toxicidades agudas y tardías (p=0.000001) (Widel et al., 2003).
Los estudios de Alapetite et al. (1999) y Muller et al. (2001) mediante comet assay en linfocitos mostraban una relación entre el daño del ADN y la toxicidad del paciente.
El estudio de Muller et al. ( 2001) en 24 pacientes sanos y 18 pacientes radiosensibles mostró que los individuos que tenían peores características en la reparación del daño en linfocitos irradiados “in vitro”, tenían una mayor probabilidad de ser sensibles a la radiación (Muller et al., 2001).
En cuanto a los estudios mediante PFGE, tampoco hay resultados concluyentes. El estudio maduro de López et al., (2005) en pacientes no seleccionadas y sometidas a radioterapia por cáncer de mama, el número inicial de roturas dobles de cadena no resultó indicador de la toxicidad clínica radioinducida. Nuestro grupo (Pinar et al., 2007) analizó las dsb radioinducidas en PBLs, medidas por PFGE en 40 pacientes diagnosticadas de cáncer de mama avanzado tratadas con radioterapia hiperfraccionada y su posible relación con la toxicidad aguda y tardía, demostrándose una relación significativa entre mayores tasas de roturas dobles de cadena y toxicidad tardía grado 3, en el subgrupo de pacientes (29 pacientes) tratadas a dosis de 81,6 Gy.