4.2 Cáncer De Nasofaringe (8%)
4.2 Cáncer De Nasofaringe (8%)
En su aparición aparecen relacionados varios factores: la dieta, el virus de Epstein-Barr y la susceptibilidad genética. Hay dos picos de incidencia: en la adolescencia y en la 4ª-5ª década de la vida, siendo mejor el pronóstico en los pacientes más jóvenes. Este tumor crece por infiltración, muchas veces submucosa, por lo que la exploración ORL puede ser normal y el tumor estar extendiéndose a las regiones vecinas. Es muy frecuente su aparición como una tumoración cervical (90%). Los síntomas que produce son dolor, hipoacusia y obstrucción nasal. Es el que más tendencia tiene a diseminarse de todos los tumores de cabeza y cuello, tanto diseminación ganglionar como a distancia.
El tratamiento estándar es la radioterapia, ya que se trata de una localización de difícil acceso quirúrgico y donde no se pueden conseguir márgenes adecuados de resección. Los campos de radiación deben ser amplios, incluyendo los ganglios cervicales y supraclaviculares. Hay que destacar que el control de la enfermedad ganglionar con radioterapia es muy efectivo, consiguiéndose incluso la desaparición completa de las grandes masas adenopáticas. En los tumores localmente avanzados se asocia quimioterapia, consiguiéndose buenas tasas de respuesta. La braquiterapia también se ha utilizado en estos tumores tanto como sobreimpresión tras la RT externa como en el tratamiento de las recidivas tumorales.